“ La gente de Israel comprendió que el rey no quería hacerles caso, y le respondieron en los mismos términos: "¿Qué tenemos que ver con David y con sus hijos? No es de nuestra familia, ¡arréglate con los tuyos, hijo de David! Los de Israel, vámonos." Así, pues, los israelitas volvieron a sus tiendas.
.”
Biblia LatinoAmericana 1995 (bla95)