“ Cuando Naamán estaba ya a cierta distancia, Guejazí, el muchacho de Eliseo, se dijo: "¡Pensar que mi señor no tomó los regalos que le trajo ese arameo! ¡Por Yavé, que correré tras él y recuperaré algo de esto!"
.”
Biblia LatinoAmericana 1995 (bla95)