“ Después de esto, el rey y sus hombres marcharon hacia Jerusalén contra los jebuseos, que ocupaban el país. Estos le dijeron: "No entrarás aquí, pues bastarán los cojos y los ciegos para rechazarte." Con eso querían decir que jamás iba a entrar en la ciudad.
.”
Biblia LatinoAmericana 1995 (bla95)