Salmos 42:5-6 - ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío. Dios mío, mi alma está abatida en mí; Me acordaré, por tanto, de ti desde la tierra del Jordán, Y de los hermonitas, desde el monte de Mizar. (Versículos como Salmos 42:5)

Job 21:6 - Aun yo mismo, cuando me acuerdo, me asombro, Y el temblor estremece mi carne. (Versículos como Job 21:6)

Salmos 44:25 - Porque nuestra alma está agobiada hasta el polvo, Y nuestro cuerpo está postrado hasta la tierra. (Versículos como Salmos 44:25)