Biblia Online

La Palabra de Dios preservada y viva

Referencias Cruzadas de SALMOS 116:4

“ pero invoqué el nombre del Señor: "¡Ay, Señor, salva mi vida!" ”


Biblia LatinoAmericana 1995 (bla95)
 
 

Versiculos relacionados con SALMOS 116:4 (Referencias Cruzadas)


Salmos 22:20 - Libra de la espada mi alma, Del poder del perro mi vida. (Versículos como Salmos 22:20)

Salmos 30:7-8 - Porque tú, Jehová, con tu favor me afirmaste como monte fuerte. Escondiste tu rostro, fui turbado. A ti, oh Jehová, clamaré, Y al Señor suplicaré. (Versículos como Salmos 30:7)

Salmos 18:6 - En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. El oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos. (Versículos como Salmos 18:6)

Salmos 142:4-6 - Mira a mi diestra y observa, pues no hay quien me quiera conocer; No tengo refugio, ni hay quien cuide de mi vida. Clamé a ti, oh Jehová; Dije: Tú eres mi esperanza, Y mi porción en la tierra de los vivientes. Escucha mi clamor, porque estoy muy afligido. Líbrame de los que me persiguen, porque son más fuertes que yo. (Versículos como Salmos 142:4)

Salmos 40:12-13 - Porque me han rodeado males sin número; Me han alcanzado mis maldades, y no puedo levantar la vista. Se han aumentado más que los cabellos de mi cabeza, y mi corazón me falla. Quieras, oh Jehová, librarme; Jehová, apresúrate a socorrerme. (Versículos como Salmos 40:12)

Lucas 23:42-43 - Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso. (Versículos como Lucas 23:42)

Salmos 50:15 - E invócame en el día de la angustia; Te libraré, y tú me honrarás. (Versículos como Salmos 50:15)

2 Crónicas 33:12-13 - Mas luego que fue puesto en angustias, oró a Jehová su Dios, humillado grandemente en la presencia del Dios de sus padres. Y habiendo orado a él, fue atendido; pues Dios oyó su oración, y lo restauró a Jerusalén, a su reino. Entonces reconoció Manasés que Jehová era Dios. (Versículos como 2 Crónicas 33:12)

Isaías 38:1-3 - En aquellos días Ezequías enfermó de muerte. Y vino a él el profeta Isaías hijo de Amoz, y le dijo: Jehová dice así: Ordena tu casa, porque morirás, y no vivirás. Entonces volvió Ezequías su rostro a la pared, e hizo oración a Jehová, y dijo: Oh Jehová, te ruego que te acuerdes ahora que he andado delante de ti en verdad y con íntegro corazón, y que he hecho lo que ha sido agradable delante de tus ojos. Y lloró Ezequías con gran lloro. (Versículos como Isaías 38:1)