1 De no estar el Señor en favor nuestro, que lo diga Israel,
2 de no estar el Señor en favor nuestro, cuando el mundo se tiró contra nosotros,
3 nos habrían devorado vivos en el fuego de su cólera.
4 Entonces las aguas nos habrían arrollado y el torrente, pasado por encima,
5 entonces habrían pasado sobre nuestra alma las aguas impetuosas.
6 Bendito sea el Señor que no nos dio por presa de sus dientes.
7 Nuestra alma como pájaro escapó de la red que puso el cazador. La malla se rompió y nosotros escapamos.
8 Nuestro auxilio está en el Nombre del Señor, que hizo el cielo y la tierra.