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ECLESIASTES 11 Paralela rv60
y bla95

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Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)


1 Echa tu pan sobre las aguas; porque después de muchos días lo hallarás.

2 Reparte a siete, y aun a ocho; porque no sabes el mal que vendrá sobre la tierra.

3 Si las nubes fueren llenas de agua, sobre la tierra la derramarán; y si el árbol cayere al sur, o al norte, en el lugar que el árbol cayere, allí quedará.

4 El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará.

5 Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

6 Por la mañana siembra tu semilla, y a la tarde no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál es lo mejor, si esto o aquello, o si lo uno y lo otro es igualmente bueno.

7 Suave ciertamente es la luz, y agradable a los ojos ver el sol;

8 pero aunque un hombre viva muchos años, y en todos ellos tenga gozo, acuérdese sin embargo que los días de las tinieblas serán muchos. Todo cuanto viene es vanidad.

9 Alégrate, joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios.

10 Quita, pues, de tu corazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad.

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1 Lanza tu pan a la superficie del agua; después de un tiempo volverá a ti.

2 Compártelo con los asociados, ocho más bien que siete, pues no sabes qué desgracia puede azotar al país.

3 Cuando las nubes están llenas, descargan la lluvia sobre la tierra. Así como el árbol cae, ya sea al norte o al sur, así queda tumbado.

4 Observar al viento, no es sembrar; considerar las nubes, no es cosechar.

5 Tú no sabes por dónde llegó el espíritu al niño en el vientre de la mujer embarazada: otro tanto ignoras la obra de Dios tomada en su conjunto.

6 Siembra de mañana tu grano y que en la tarde tu mano todavía esté activa: no sabes cuál de las dos cosas será más útil, si una u otra.

7 Suave es la luz y es bueno ver el sol.

8 Aún cargado de años, que el hombre sepa tomarles el gusto a todos ellos; pero que tome en cuenta los días del anochecer, pues por muchos que sean, nada es seguro para el porvenir.

9 Muchacho, conoce la felicidad, mientras seas joven, y toma temprano las buenas decisiones. Elige tu camino como mejor te parezca, sin olvidar que Dios te pedirá cuenta de todo.

10 No dejes que la amargura se instale en ti, ni la enfermedad en tu cuerpo: ¡juventud y cabellos negros son traicioneros!