< Anterior |
Siguiente > |
1 Enviad cordero al señor de la tierra, desde Sela del desierto al monte de la hija de Sion.
2 Y cual ave espantada que huye de su nido, así serán las hijas de Moab en los vados de Arnón.
3 Reúne consejo, haz juicio; pon tu sombra en medio del día como la noche; esconde a los desterrados, no entregues a los que andan errantes.
4 Moren contigo mis desterrados, oh Moab; sé para ellos escondedero de la presencia del devastador; porque el atormentador fenecerá, el devastador tendrá fin, el pisoteador será consumido de sobre la tierra.
5 Y se dispondrá el trono en misericordia; y sobre él se sentará firmemente, en el tabernáculo de David, quien juzgue y busque el juicio, y apresure la justicia.
6 Hemos oído la soberbia de Moab; muy grandes son su soberbia, su arrogancia y su altivez; pero sus mentiras no serán firmes.
7 Por tanto, aullará Moab, todo él aullará; gemiréis en gran manera abatidos, por las tortas de uvas de Kir-hareset.
8 Porque los campos de Hesbón fueron talados, y las vides de Sibma; señores de naciones pisotearon sus generosos sarmientos; habían llegado hasta Jazer, y se habían extendido por el desierto; se extendieron sus plantas, pasaron el mar.
9 Por lo cual lamentaré con lloro de Jazer por la viña de Sibma; te regaré con mis lágrimas, oh Hesbón y Eleale; porque sobre tus cosechas y sobre tu siega caerá el grito de guerra.
10 Quitado es el gozo y la alegría del campo fértil; en las viñas no cantarán, ni se regocijarán; no pisará vino en los lagares el pisador; he hecho cesar el grito del lagarero.
11 Por tanto, mis entrañas vibrarán como arpa por Moab, y mi corazón por Kir-hareset.
12 Y cuando apareciere Moab cansado sobre los lugares altos, cuando venga a su santuario a orar, no le valdrá.
13 Esta es la palabra que pronunció Jehová sobre Moab desde aquel tiempo;
14 pero ahora Jehová ha hablado, diciendo: Dentro de tres años, como los años de un jornalero, será abatida la gloria de Moab, con toda su gran multitud; y los sobrevivientes serán pocos, pequeños y débiles.
1 "Desde Sela que está en el desierto, lleven corderos al monte de la hija de Sión al soberano del país."
2 Y como pichones asustados que han echado de su nido, andan las hijas de Moab por los vados del río Arnón.
3 "Llamen a consejo, tomen una decisión, extiende tu sombra como la noche contra el ardor del sol; esconde a los perseguidos, no entregues al que huye.
4 Dales hospedaje a los fugitivos de Moab, ofréceles un asilo frente al saqueador." (Cuando se termine la opresión, y se hayan alejado los que aplastan al país."
5 el trono será restablecido, estable gracias a la bondad, y en él se sentará bajo la carpa de David, un gobernante leal, amante del derecho, y dispuesto a hacer justicia.)
6 Tenemos noticias del orgullo de Moab, de ese orgullo enorme, de su vanidad, soberbia y petulancia, de sus palabrerías que no llevan a ninguna parte.
7 Dejemos que los moabitas lloren por Moab y se lamentan todos juntos. Todos suspiran apenados por las tortas de uva de Quir-Jerés.
8 Pues se han marchitado los campos de Jesebón y la viña de Sibma, cuyos racimos arrancaron los amos de las naciones. Ella llegaba hasta Yazer y se perdía en el desierto; sus sarmientos se extendían hasta más allá del mar.
9 También lloro, como llora Yazer, por la viña de Sibma, los regaré con mis lágrimas, Jesebón y Elealé. Porque sobre tu cosecha y tu vendimia ya no se escuchan las canciones;
10 alegría y el contento se han ido de sus huertos. Ya no cantan ni aplauden en las viñas, ya no se pisa la uva en el lagar, y se han terminado los cantos.
11 Por eso mis entrañas se conmueven por Moab, como una cítara, y mi corazón por Quir-Jerés.
12 Por más que Moab se canse subiendo a los santuarios, o entre a su templo a rezar, nada conseguirá con eso.
13 Esta es la sentencia que, hace tiempo, pronunció Yavé contra Moab. Y ahora Yavé declara: "Dentro de tres años, los mismos que dura el contrato de un soldado, el famoso poder de Moab, con su gran población, se vendrá abajo y sólo quedará una minoría sin importancia."