Filipenses 2:15-16 - para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo; asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado. (Versículos como Filipenses 2:15)

Salmos 37:28 - Porque Jehová ama la rectitud, Y no desampara a sus santos. Para siempre serán guardados; Mas la descendencia de los impíos será destruida. (Versículos como Salmos 37:28)

2 Corintios 1:21 - Y el que nos confirma con vosotros en Cristo, y el que nos ungió, es Dios, (Versículos como 2 Corintios 1:21)

2 Pedro 3:10 - Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. (Versículos como 2 Pedro 3:10)

2 Pedro 3:14 - Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. (Versículos como 2 Pedro 3:14)

1 Corintios 5:5 - el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús. (Versículos como 1 Corintios 5:5)

1 Tesalonicenses 3:13 - para que sean afirmados vuestros corazones, irreprensibles en santidad delante de Dios nuestro Padre, en la venida de nuestro Señor Jesucristo con todos sus santos. (Versículos como 1 Tesalonicenses 3:13)

Filipenses 1:6 - estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo; (Versículos como Filipenses 1:6)

Judas 1:24-25 - Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén. (Versículos como Judas 1:24)

2 Tesalonicenses 3:3 - Pero fiel es el Señor, que os afirmará y guardará del mal. (Versículos como 2 Tesalonicenses 3:3)