Biblia Online

La Palabra de Dios preservada y viva

Referencias Cruzadas de ISAIAS 8:18

“He aquí, yo y los hijos que me dio Jehová somos por señales y presagios en Israel, de parte de Jehová de los ejércitos, que mora en el monte de Sion.”


Biblia Reina Valera 1960 (rv60)
 
 

Versiculos relacionados con ISAIAS 8:18 (Referencias Cruzadas)


Lucas 2:34 - Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí, éste está puesto para caída y para levantamiento de muchos en Israel, y para señal que será contradicha (Versículos como Lucas 2:34)

Salmos 9:11 - Cantad a Jehová, que habita en Sion; Publicad entre los pueblos sus obras. (Versículos como Salmos 9:11)

Salmos 22:30 - La posteridad le servirá; Esto será contado de Jehová hasta la postrera generación. (Versículos como Salmos 22:30)

Hebreos 12:22 - sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, (Versículos como Hebreos 12:22)

Isaías 12:6 - Regocíjate y canta, oh moradora de Sion; porque grande es en medio de ti el Santo de Israel. (Versículos como Isaías 12:6)

Isaías 14:32 - ¿Y qué se responderá a los mensajeros de las naciones? Que Jehová fundó a Sion, y que a ella se acogerán los afligidos de su pueblo. (Versículos como Isaías 14:32)

Zacarías 3:8 - Escucha pues, ahora, Josué sumo sacerdote, tú y tus amigos que se sientan delante de ti, porque son varones simbólicos. He aquí, yo traigo a mi siervo el Renuevo. (Versículos como Zacarías 3:8)

Isaías 8:3 - Y me llegué a la profetisa, la cual concibió, y dio a luz un hijo. Y me dijo Jehová: Ponle por nombre Maher-salal-hasbaz. (Versículos como Isaías 8:3)

1 Corintios 4:9-13 - Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres. Nosotros somos insensatos por amor de Cristo, mas vosotros prudentes en Cristo; nosotros débiles, mas vosotros fuertes; vosotros honorables, mas nosotros despreciados. Hasta esta hora padecemos hambre, tenemos sed, estamos desnudos, somos abofeteados, y no tenemos morada fija. Nos fatigamos trabajando con nuestras propias manos; nos maldicen, y bendecimos; padecemos persecución, y la soportamos. Nos difaman, y rogamos; hemos venido a ser hasta ahora como la escoria del mundo, el desecho de todos. (Versículos como 1 Corintios 4:9)