Jeremías 24:1 - Después de haber transportado Nabucodonosor rey de Babilonia a Jeconías hijo de Joacim, rey de Judá, a los príncipes de Judá y los artesanos y herreros de Jerusalén, y haberlos llevado a Babilonia, me mostró Jehová dos cestas de higos puestas delante del templo de Jehová.
(Versículos como Jeremías 24:1)Jeremías 24:5 - Así ha dicho Jehová Dios de Israel: Como a estos higos buenos, así miraré a los transportados de Judá, a los cuales eché de este lugar a la tierra de los caldeos, para bien.
(Versículos como Jeremías 24:5)Jeremías 22:10 - No lloréis al muerto, ni de él os condoláis; llorad amargamente por el que se va, porque no volverá jamás, ni verá la tierra donde nació.
(Versículos como Jeremías 22:10)Jeremías 28:10 - Entonces el profeta Hananías quitó el yugo del cuello del profeta Jeremías, y lo quebró.
(Versículos como Jeremías 28:10)Jeremías 22:26-28 - Te haré llevar cautivo a ti y a tu madre que te dio a luz, a tierra ajena en que no nacisteis; y allá moriréis. Y a la tierra a la cual ellos con toda el alma anhelan volver, allá no volverán. ¿Es este hombre Conías una vasija despreciada y quebrada? ¿Es un trasto que nadie estima? ¿Por qué fueron arrojados él y su generación, y echados a tierra que no habían conocido?
(Versículos como Jeremías 22:26)2 Reyes 25:27-30 - Aconteció a los treinta y siete años del cautiverio de Joaquín rey de Judá, en el mes duodécimo, a los veintisiete días del mes, que Evil-merodac rey de Babilonia, en el primer año de su reinado, libertó a Joaquín rey de Judá, sacándolo de la cárcel; y le habló con benevolencia, y puso su trono más alto que los tronos de los reyes que estaban con él en Babilonia. Y le cambió los vestidos de prisionero, y comió siempre delante de él todos los días de su vida. Y diariamente le fue dada su comida de parte del rey, de continuo, todos los días de su vida.
(Versículos como 2 Reyes 25:27)Jeremías 30:8 - En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, yo quebraré su yugo de tu cuello, y romperé tus coyundas, y extranjeros no lo volverán más a poner en servidumbre,
(Versículos como Jeremías 30:8)