Números 28:1-29 - Habló Jehová a Moisés, diciendo: Manda a los hijos de Israel, y diles: Mi ofrenda, mi pan con mis ofrendas encendidas en olor grato a mí, guardaréis, ofreciéndomelo a su tiempo. Y les dirás: Esta es la ofrenda encendida que ofreceréis a Jehová: dos corderos sin tacha de un año, cada día, será el holocausto continuo. Un cordero ofrecerás por la mañana, y el otro cordero ofrecerás a la caída de la tarde; y la décima parte de un efa de flor de harina, amasada con un cuarto de un hin de aceite de olivas machacadas, en ofrenda. Es holocausto continuo, que fue ordenado en el monte Sinaí para olor grato, ofrenda encendida a Jehová. Y su libación, la cuarta parte de un hin con cada cordero; derramarás libación de vino superior ante Jehová en el santuario. Y ofrecerás el segundo cordero a la caída de la tarde; conforme a la ofrenda de la mañana y conforme a su libación ofrecerás, ofrenda encendida en olor grato a Jehová. Mas el día de reposo, dos corderos de un año sin defecto, y dos décimas de flor de harina amasada con aceite, como ofrenda, con su libación. Es el holocausto de cada día de reposo, además del holocausto continuo y su libación. Al comienzo de vuestros meses ofreceréis en holocausto a Jehová dos becerros de la vacada, un carnero, y siete corderos de un año sin defecto; y tres décimas de flor de harina amasada con aceite, como ofrenda con cada becerro; y dos décimas de flor de harina amasada con aceite, como ofrenda con cada carnero; y una décima de flor de harina amasada con aceite, en ofrenda que se ofrecerá con cada cordero; holocausto de olor grato, ofrenda encendida a Jehová. Y sus libaciones de vino, medio hin con cada becerro, y la tercera parte de un hin con cada carnero, y la cuarta parte de un hin con cada cordero. Este es el holocausto de cada mes por todos los meses del año. Y un macho cabrío en expiación se ofrecerá a Jehová, además del holocausto continuo con su libación. Pero en el mes primero, a los catorce días del mes, será la pascua de Jehová. Y a los quince días de este mes, la fiesta solemne; por siete días se comerán panes sin levadura. El primer día será santa convocación; ninguna obra de siervos haréis. Y ofreceréis como ofrenda encendida en holocausto a Jehová, dos becerros de la vacada, y un carnero, y siete corderos de un año; serán sin defecto. Y su ofrenda de harina amasada con aceite: tres décimas con cada becerro, y dos décimas con cada carnero; y con cada uno de los siete corderos ofreceréis una décima. Y un macho cabrío por expiación, para reconciliaros. Esto ofreceréis además del holocausto de la mañana, que es el holocausto continuo. Conforme a esto ofreceréis cada uno de los siete días, vianda y ofrenda encendida en olor grato a Jehová; se ofrecerá además del holocausto continuo, con su libación. Y el séptimo día tendréis santa convocación; ninguna obra de siervos haréis. Además, el día de las primicias, cuando presentéis ofrenda nueva a Jehová en vuestras semanas, tendréis santa convocación; ninguna obra de siervos haréis. Y ofreceréis en holocausto, en olor grato a Jehová, dos becerros de la vacada, un carnero, siete corderos de un año; y la ofrenda de ellos, flor de harina amasada con aceite, tres décimas con cada becerro, dos décimas con cada carnero, y con cada uno de los siete corderos una décima;
(Versículos como Números 28:1)2 Crónicas 24:5-14 - Y reunió a los sacerdotes y los levitas, y les dijo: Salid por las ciudades de Judá, y recoged dinero de todo Israel, para que cada año sea reparada la casa de vuestro Dios; y vosotros poned diligencia en el asunto. Pero los levitas no pusieron diligencia. Por lo cual el rey llamó al sumo sacerdote Joiada y le dijo: ¿Por qué no has procurado que los levitas traigan de Judá y de Jerusalén la ofrenda que Moisés siervo de Jehová impuso a la congregación de Israel para el tabernáculo del testimonio? Porque la impía Atalía y sus hijos habían destruído la casa de Dios, y además habían gastado en los ídolos todas las cosas consagradas de la casa de Jehová. Mandó, pues, el rey que hiciesen un arca, la cual pusieron fuera, a la puerta de la casa de Jehová; e hicieron pregonar en Judá y en Jerusalén, que trajesen a Jehová la ofrenda que Moisés siervo de Dios había impuesto a Israel en el desierto. Y todos los jefes y todo el pueblo se gozaron, y trajeron ofrendas, y las echaron en el arca hasta llenarla. Y cuando venía el tiempo para llevar el arca al secretario del rey por mano de los levitas, cuando veían que había mucho dinero, venía el escriba del rey, y el que estaba puesto por el sumo sacerdote, y llevaban el arca, y la vaciában, y la volvían a su lugar. Así lo hacían de día en día, y recogían mucho dinero; y el rey y Joiada lo daban a los que hacían el trabajo del servicio de la casa de Jehová, y tomaban canteros y carpinteros que reparasen la casa de Jehová, y artífices en hierro y bronce para componer la casa. Hacían, pues, los artesanos la obra, y por sus manos la obra fue restaurada, y restituyeron la casa de Dios a su antigua condición, y la consolidaron. Y cuando terminaron, trajeron al rey y a Joiada lo que quedaba del dinero, e hicieron de él utensilios para la casa de Jehová, utensilios para el servicio, morteros, cucharas, vasos de oro y de plata. Y sacrificaban holocaustos continuamente en la casa de Jehová todos los días de Joiada.
(Versículos como 2 Crónicas 24:5)