Isaías 33:15 - El que camina en justicia y habla lo recto; el que aborrece la ganancia de violencias, el que sacude sus manos para no recibir cohecho, el que tapa sus oídos para no oír propuestas sanguinarias; el que cierra sus ojos para no ver cosa mala; (Versículos como Isaías 33:15)

1 Juan 2:16 - Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. (Versículos como 1 Juan 2:16)

Proverbios 4:25 - Tus ojos miren lo recto, Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante. (Versículos como Proverbios 4:25)

Números 15:39 - Y os servirá de franja, para que cuando lo veáis os acordéis de todos los mandamientos de Jehová, para ponerlos por obra; y no miréis en pos de vuestro corazón y de vuestros ojos, en pos de los cuales os prostituyáis. (Versículos como Números 15:39)

Mateo 5:28 - Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. (Versículos como Mateo 5:28)

Salmos 119:25 - Abatida hasta el polvo está mi alma; Vivifícame según tu palabra. (Versículos como Salmos 119:25)

Josué 7:21 - Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello. (Versículos como Josué 7:21)

Job 31:1 - Hice pacto con mis ojos; ¿Cómo, pues, había yo de mirar a una virgen? (Versículos como Job 31:1)

Salmos 119:40 - He aquí yo he anhelado tus mandamientos; Vivifícame en tu justicia. (Versículos como Salmos 119:40)

Proverbios 23:5 - ¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? Porque se harán alas Como alas de águila, y volarán al cielo. (Versículos como Proverbios 23:5)

Salmos 71:20 - Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, Volverás a darme vida, Y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra. (Versículos como Salmos 71:20)

2 Samuel 11:2 - Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa. (Versículos como 2 Samuel 11:2)