Salmos 69:17 - No escondas de tu siervo tu rostro, Porque estoy angustiado; apresúrate, óyeme. (Versículos como Salmos 69:17)

Salmos 143:7 - Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu; No escondas de mí tu rostro, No venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura. (Versículos como Salmos 143:7)

Salmos 102:2 - No escondas de mí tu rostro en el día de mi angustia; Inclina a mí tu oído; Apresúrate a responderme el día que te invocare. (Versículos como Salmos 102:2)

Salmos 24:5 - El recibirá bendición de Jehová, Y justicia del Dios de salvación. (Versículos como Salmos 24:5)

Isaías 46:3-4 - Oídme, oh casa de Jacob, y todo el resto de la casa de Israel, los que sois traídos por mí desde el vientre, los que sois llevados desde la matriz. Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las canas os soportaré yo; yo hice, yo llevaré, yo soportaré y guardaré. (Versículos como Isaías 46:3)

1 Crónicas 28:9 - Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende todo intento de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si lo dejares, él te desechará para siempre. (Versículos como 1 Crónicas 28:9)

Jeremías 32:40 - Y haré con ellos pacto eterno, que no me volveré atrás de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de ellos, para que no se aparten de mí. (Versículos como Jeremías 32:40)

Hebreos 13:5 - Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré; (Versículos como Hebreos 13:5)

1 Samuel 7:12 - Tomó luego Samuel una piedra y la puso entre Mizpa y Sen, y le puso por nombre Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová. (Versículos como 1 Samuel 7:12)

Salmos 88:1 - Oh Jehová, Dios de mi salvación, Día y noche clamo delante de ti. (Versículos como Salmos 88:1)

2 Corintios 1:9-10 - Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos; el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte; (Versículos como 2 Corintios 1:9)

Salmos 71:5-6 - Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, Seguridad mía desde mi juventud. En ti he sido sustentado desde el vientre; De las entrañas de mi madre tú fuiste el que me sacó; De ti será siempre mi alabanza. (Versículos como Salmos 71:5)

Salmos 44:24 - ¿Por qué escondes tu rostro, Y te olvidas de nuestra aflicción, y de la opresión nuestra? (Versículos como Salmos 44:24)

Salmos 51:11 - No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu. (Versículos como Salmos 51:11)

Salmos 38:21-22 - No me desampares, oh Jehová; Dios mío, no te alejes de mí. Apresúrate a ayudarme, Oh Señor, mi salvación. (Versículos como Salmos 38:21)

2 Timoteo 4:17-18 - Pero el Señor estuvo a mi lado, y me dio fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación, y que todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león. Y el Señor me librará de toda obra mala, y me preservará para su reino celestial. A él sea gloria por los siglos de los siglos. Amén. (Versículos como 2 Timoteo 4:17)

Salmos 13:1 - ¿Hasta cuándo, Jehová? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí? (Versículos como Salmos 13:1)

Salmos 119:121 - Juicio y justicia he hecho; No me abandones a mis opresores. (Versículos como Salmos 119:121)

Salmos 71:17-18 - Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, Y hasta ahora he manifestado tus maravillas. Aun en la vejez y las canas, oh Dios, no me desampares, Hasta que anuncie tu poder a la posteridad, Y tu potencia a todos los que han de venir, (Versículos como Salmos 71:17)

Isaías 59:2 - pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír. (Versículos como Isaías 59:2)

Isaías 50:1 - Así dijo Jehová: ¿Qué es de la carta de repudio de vuestra madre, con la cual yo la repudié? ¿O quiénes son mis acreedores, a quienes yo os he vendido? He aquí que por vuestras maldades sois vendidos, y por vuestras rebeliones fue repudiada vuestra madre. (Versículos como Isaías 50:1)