Salmos 28:1 - A ti clamaré, oh Jehová. Roca mía, no te desentiendas de mí, Para que no sea yo, dejándome tú, Semejante a los que descienden al sepulcro. (Versículos como Salmos 28:1)

Salmos 86:13 - Porque tu misericordia es grande para conmigo, Y has librado mi alma de las profundidades del Seol. (Versículos como Salmos 86:13)

Salmos 16:10 - Porque no dejarás mi alma en el Seol, Ni permitirás que tu santo vea corrupción. (Versículos como Salmos 16:10)

Salmos 71:20 - Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, Volverás a darme vida, Y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra. (Versículos como Salmos 71:20)

Salmos 56:13 - Porque has librado mi alma de la muerte, Y mis pies de caída, Para que ande delante de Dios En la luz de los que viven. (Versículos como Salmos 56:13)

Job 33:28 - Dios redimirá su alma para que no pase al sepulcro, Y su vida se verá en luz. (Versículos como Job 33:28)

Job 33:19-22 - También sobre su cama es castigado Con dolor fuerte en todos sus huesos, Que le hace que su vida aborrezca el pan, Y su alma la comida suave. Su carne desfallece, de manera que no se ve, Y sus huesos, que antes no se veían, aparecen. Su alma se acerca al sepulcro, Y su vida a los que causan la muerte. (Versículos como Job 33:19)

Jonás 2:4-6 - Entonces dije: Desechado soy de delante de tus ojos; Mas aún veré tu santo templo. Las aguas me rodearon hasta el alma, Rodeóme el abismo; El alga se enredó a mi cabeza. Descendí a los cimientos de los montes; La tierra echó sus cerrojos sobre mí para siempre; Mas tú sacaste mi vida de la sepultura, oh Jehová Dios mío. (Versículos como Jonás 2:4)

Salmos 116:8 - Pues tú has librado mi alma de la muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de resbalar. (Versículos como Salmos 116:8)

Isaías 38:17-18 - He aquí, amargura grande me sobrevino en la paz, mas a ti agradó librar mi vida del hoyo de corrupción; porque echaste tras tus espaldas todos mis pecados. Porque el Seol no te exaltará, ni te alabará la muerte; ni los que descienden al sepulcro esperarán tu verdad. (Versículos como Isaías 38:17)

Salmos 40:1-2 - Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. (Versículos como Salmos 40:1)