< Anterior |
Siguiente > |
1 Alabad a Jehová, porque él es bueno, Porque para siempre es su misericordia.
2 Alabad al Dios de los dioses, Porque para siempre es su misericordia.
3 Alabad al Señor de los señores, Porque para siempre es su misericordia.
4 Al único que hace grandes maravillas, Porque para siempre es su misericordia.
5 Al que hizo los cielos con entendimiento, Porque para siempre es su misericordia.
6 Al que extendió la tierra sobre las aguas, Porque para siempre es su misericordia.
7 Al que hizo las grandes lumbreras, Porque para siempre es su misericordia.
8 El sol para que señorease en el día, Porque para siempre es su misericordia.
9 La luna y las estrellas para que señoreasen en la noche, Porque para siempre es su misericordia.
10 Al que hirió a Egipto en sus primogénitos, Porque para siempre es su misericordia.
11 Al que sacó a Israel de en medio de ellos, Porque para siempre es su misericordia.
12 Con mano fuerte, y brazo extendido, Porque para siempre es su misericordia.
13 Al que dividió el Mar Rojo en partes, Porque para siempre es su misericordia;
14 E hizo pasar a Israel por en medio de él, Porque para siempre es su misericordia;
15 Y arrojó a Faraón y a su ejército en el Mar Rojo, Porque para siempre es su misericordia.
16 Al que pastoreó a su pueblo por el desierto, Porque para siempre es su misericordia.
17 Al que hirió a grandes reyes, Porque para siempre es su misericordia;
18 Y mató a reyes poderosos, Porque para siempre es su misericordia;
19 A Sehón rey amorreo, Porque para siempre es su misericordia;
20 Y a Og rey de Basán, Porque para siempre es su misericordia;
21 Y dio la tierra de ellos en heredad, Porque para siempre es su misericordia;
22 En heredad a Israel su siervo, Porque para siempre es su misericordia.
23 El es el que en nuestro abatimiento se acordó de nosotros, Porque para siempre es su misericordia;
24 Y nos rescató de nuestros enemigos, Porque para siempre es su misericordia.
25 El que da alimento a todo ser viviente, Porque para siempre es su misericordia.
26 Alabad al Dios de los cielos, Porque para siempre es su misericordia.
1 ¡Den gracias al Señor, porque él es bueno, porque su amor perdura para siempre!
2 Den gracias al que es Dios de los dioses, porque su amor perdura para siempre.
3 Den gracias al Señor de los señores, porque su amor perdura para siempre.
4 al único que ha hecho maravillas, porque su amor perdura para siempre.
5 al que con sabiduría hizo los cielos, porque su amor perdura para siempre.
6 al que puso la tierra sobre las aguas, porque su amor perdura para siempre.
7 al que creó las grandes luminarias, porque su amor perdura para siempre.
8 al sol para que gobierne el día, porque su amor perdura para siempre.
9 la luna y las estrellas para que manden la noche, porque su amor perdura para siempre.
10 al que hirió a Egipto en sus primogénitos, porque su amor perdura para siempre.
11 y a Israel lo sacó de en medio de ellos, porque su amor perdura para siempre.
12 con mano fuerte y brazo levantado, porque su amor perdura para siempre.
13 al que separó en dos el Mar de Juncos, porque su amor perdura para siempre.
14 y condujo a Israel por medio de él, porque su amor perdura para siempre.
15 allí tumbó a Faraón y a su ejército, porque su amor perdura para siempre.
16 al que guió a su pueblo en el desierto, porque su amor perdura para siempre.
17 al que aplastó a reyes poderosos, porque su amor perdura para siempre.
18 y dio muerte a monarcas respetables, porque su amor perdura para siempre.
19 a Sijón, rey de los Amorreos, porque su amor perdura para siempre.
20 y a Og, rey de Basán, porque su amor perdura para siempre.
21 y traspasó sus tierras como herencia, porque su amor perdura para siempre.
22 como herencia a Israel, su servidor, porque su amor perdura para siempre.
23 Se acordó de nosotros en nuestro abatimiento, porque su amor perdura para siempre.
24 y nos libró de nuestros opresores, porque su amor perdura para siempre.
25 El da su pan a todo ser carnal, porque su amor perdura para siempre.
26 Den gracias al que es Dios de los cielos, porque su amor perdura para siempre.