“ Y procedió a subir de allí a Betel. Mientras iba subiendo por el camino, hubo unos muchachitos que salieron de la ciudad y empezaron a mofarse de él y que siguieron diciéndole: “¡Sube, calvo! ¡Sube, calvo!”.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)