“ Y Eliseo estaba sentado en su propia casa, y los ancianos estaban sentados con él, cuando él envió a un hombre de delante de sí. Antes que el mensajero pudiera entrar a donde él, él mismo dijo a los ancianos: “¿Han visto ustedes cómo este hijo de un asesino ha enviado a quitarme la cabeza? Vean: tan pronto como llegue el mensajero, cierren la puerta, y tienen que aguantarlo con la puerta. ¿No se oye el sonido de los pies de su señor detrás de él?”.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)