“ El rey se levantó inmediatamente de noche y dijo a sus siervos: “Permítanme declararles, por favor, lo que nos han hecho los sirios. Bien saben ellos que tenemos hambre; y por eso salieron del campamento para esconderse en el campo, diciendo: ‘Saldrán de la ciudad y los prenderemos vivos, y entraremos en la ciudad’”.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)