DEUTERONOMIO 15:20 Contexto

entonces tienes que tomar un punzón y horadarle la oreja contra la puerta, y él tiene que llegar a ser tu esclavo hasta tiempo indefinido. Y a tu esclava también debes hacer de esta manera. No debe ser cosa dura a tus ojos cuando lo envíes de tu compañía como persona puesta en libertad; pues al doble del valor de un trabajador asalariado te ha servido seis años, y Jehová tu Dios te ha bendecido en todo lo que hacías. ”Todo primogénito macho que nazca en tu vacada y en tu rebaño lo debes santificar a Jehová tu Dios. Ningún servicio debes efectuar con el primogénito de tu toro, ni esquilar el primogénito de tu rebaño. Delante de Jehová tu Dios lo debes comer año por año en el lugar que Jehová escoja, tú y tu casa. Y en caso de que resulte haber en él algún defecto, porque sea cojo o ciego, cualquier defecto grave, no debes sacrificarlo a Jehová tu Dios. Dentro de tus puertas lo debes comer, el inmundo y el limpio juntos, como la gacela y como el ciervo. Sólo su sangre no debes comer. Debes derramarla sobre la tierra como agua.

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Referencia Cruzada de DEUTERONOMIO 15:20