“ Y las naciones tendrán que saber que debido a su [propio] error ellos, los de la casa de Israel, fueron al destierro, a causa de que se portaron infielmente para conmigo, de modo que oculté de ellos mi rostro y los di en mano de sus adversarios, y siguieron cayendo —todos ellos— a espada.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)