“ Judá ahora se le acercó y dijo: “Te ruego, amo mío, que por favor permitas a tu esclavo hablar una palabra a oídos de mi amo, y que no se enardezca tu cólera contra tu esclavo, porque es lo mismo contigo que con Faraón.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)