“ Y el espíritu de Egipto tendrá que quedar perplejo en medio de él, y yo confundiré su propio consejo. Y de seguro acudirán a los dioses que nada valen, y a los encantadores, y a los médium espiritistas, y a los pronosticadores profesionales de sucesos.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)