“ Y colgó al rey de Hai en un madero hasta el atardecer; y estando el sol a punto de ponerse Josué dio el mandato, y entonces bajaron su cuerpo muerto del madero y lo arrojaron a la entrada de la puerta de la ciudad y levantaron sobre él un gran montón de piedras, hasta el día de hoy.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)