“ A lo cual ella dijo: “Sin falta iré contigo. De todos modos, la cosa de embellecimiento no llegará a ser tuya en el camino por el cual vas, porque en la mano de una mujer Jehová venderá a Sísara”. Con eso Débora se levantó y se fue con Barac a Quedes.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)