“ Marta, por otra parte, estaba distraída atendiendo a muchos quehaceres. De modo que se acercó y dijo: “Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para atender las cosas? Dile, por lo tanto, que me ayude”.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)