“ Y mi enemiga verá, y la vergüenza la cubrirá, [a la] que me decía: “¿Dónde está él, Jehová tu Dios?”. Mis propios ojos pondrán la vista sobre ella. Ahora ella llegará a ser un lugar de holladura, como el fango de las calles.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)