1 (Al director sobre instrumentos de cuerda en la octava baja. Melodía de David.)par Oh Jehová, no me censures en tu cólera, y no me corrijas en tu furia.
2 Muéstrame favor, oh Jehová, porque voy decayendo. Sáname, oh Jehová, porque mis huesos se han perturbado.
3 Sí, mi propia alma ha estado muy perturbada; y tú, oh Jehová... ¿hasta cuándo?
4 Sí vuelve, oh Jehová, sí libra mi alma; sálvame por causa de tu bondad amorosa.
5 Porque en la muerte no hay mención de ti; en el Seol, ¿quién te elogiará?
6 Me he fatigado con mi suspirar; toda la noche hago nadar mi lecho; con mis lágrimas hago desbordar mi propio diván.
7 Por la irritación [de que soy objeto] mi ojo se ha debilitado, ha envejecido a causa de todos los que me muestran hostilidad.
8 Apártense de mí, todos ustedes los que practican lo que es perjudicial, porque Jehová ciertamente oirá el sonido de mi llanto.
9 Jehová verdaderamente oirá mi petición de favor; Jehová mismo aceptará mi propia oración.
10 Todos mis enemigos quedarán muy avergonzados y perturbados; se volverán atrás, se avergonzarán instantáneamente.