SALMOS 69:20
“ El oprobio mismo ha quebrantado mi corazón, y [la herida] es incurable. Y seguí esperando que alguien se condoliera, pero no hubo nadie; y consoladores, pero no hallé ninguno.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)
SALMOS 69:20 Contexto
y no ocultes de tu siervo tu rostro. Porque estoy en grave aprieto, respóndeme rápidamente.
De veras acércate a mi alma, reclámala; a causa de mis enemigos, redímeme.
Tú mismo has llegado a conocer mi oprobio y mi ignominia y mi humillación. Todos los que me muestran hostilidad están enfrente de ti.
El oprobio mismo ha quebrantado mi corazón, y [la herida] es incurable. Y seguí esperando que alguien se condoliera, pero no hubo nadie; y consoladores, pero no hallé ninguno.
Antes bien, por alimento [me] dieron una planta venenosa, y para mi sed trataron de hacerme beber vinagre.
Que su mesa delante de ellos llegue a ser una trampa, y un lazo lo que es para su bienestar.
Que se les oscurezcan los ojos para que no vean; y haz que sus caderas mismas vacilen constantemente.
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Referencia Cruzada de SALMOS 69:20