“ Entonces Samuel tomó la alcuza de aceite y lo derramó sobre la cabeza de Saúl y después lo besó diciendo: "Yavé es quien te ha ungido como jefe de Israel. Tú dirigirás al pueblo de Yavé y lo librarás de los enemigos que lo rodean. Y ésta será para ti la señal de que el mismo Yavé te ha ungido.
.”
Biblia LatinoAmericana 1995 (bla95)