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CANTARES 6 Paralela rv60
y bla95

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Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)


1 ¿A dónde se ha ido tu amado, oh la más hermosa de todas las mujeres? ¿A dónde se apartó tu amado, Y lo buscaremos contigo?

2 Mi amado descendió a su huerto, a las eras de las especias, Para apacentar en los huertos, y para recoger los lirios.

3 Yo soy de mi amado, y mi amado es mío; El apacienta entre los lirios.

4 Hermosa eres tú, oh amiga mía, como Tirsa; De desear, como Jerusalén; Imponente como ejércitos en orden.

5 Aparta tus ojos de delante de mí, Porque ellos me vencieron. Tu cabello es como manada de cabras Que se recuestan en las laderas de Galaad.

6 Tus dientes, como manadas de ovejas que suben del lavadero, Todas con crías gemelas, Y estéril no hay entre ellas.

7 Como cachos de granada son tus mejillas Detrás de tu velo.

8 Sesenta son las reinas, y ochenta las concubinas, Y las doncellas sin número;

9 Mas una es la paloma mía, la perfecta mía; Es la única de su madre, La escogida de la que la dio a luz. La vieron las doncellas, y la llamaron bienaventurada; Las reinas y las concubinas, y la alabaron.

10 ¿Quién es ésta que se muestra como el alba, Hermosa como la luna, Esclarecida como el sol, Imponente como ejércitos en orden?

11 Al huerto de los nogales descendí A ver los frutos del valle, Y para ver si brotaban las vides, Si florecían los granados.

12 Antes que lo supiera, mi alma me puso Entre los carros de Aminadab.

13 Vuélvete, vuélvete, oh sulamita; Vuélvete, vuélvete, y te miraremos. ¿Qué veréis en la sulamita? Algo como la reunión de dos campamentos.

  X


1 ¿Adónde se fue tu amado, oh la más bella de las mujeres? ¿Adónde se dirigió tu amado, para que lo busquemos contigo? Ella:

2 Mi amado bajó a su huerto, donde se cultivan flores olorosas, pastorea su rebaño en los jardines y va a recoger lirios.

3 Yo soy para mi amado y él es para mí: él pastorea entre los lirios. El:

4 Eres hermosa, amada mía, como Tirsá, encantadora como Jerusalén, imponente como tropas ordenadas.

5 Aparta de mí tus ojos, porque me cautivan. Tus cabellos son como rebaño de cabras que ondulan por las pendientes de Galaad.

6 Tus dientes son como rebaño de ovejas que acaban de bañarse, cada una tiene su melliza y ninguna y ninguna la ha perdido.

7 Tus mejillas, son las mitades de una granada detrás de tu velo.

8 Las reinas son sesenta, ochenta las concubinas, y las jóvenes son innumerables,

9 pero una sola es mi paloma, mi toda perfecta. Ella es la hija única de su madre, la preferida de la que la engendró. Las jóvenes que la ven la felicitan, reinas y concubinas la alaban.

10 ¿Quién es ésta que surge como la aurora, bella como la luna, brillante como el sol, temible como un ejército? El:

11 Había bajado a los nogales para ver las flores del valle, por ver si la viña estaba brotando y florecían los granados.

12 No sé cómo, de repente se me ocurrió: encabecé los carros de guerra de mi pueblo.